Trans-eco-Mundos

Por la naturaleza y la vida .

Nos proponemos un acercamiento a los problemas desde sus causas.

En las culturas de las naciones nativas e indígenas, la armonía entre el espacio, la vida y la naturaleza caminaban al lado del conocimiento del ser, desde una filosofía holística y una hermenéutica fractal.

En menos de 500 años con el inicio de la modernidad, la industrialización, colonización e imperialismo occidental nos a traído a este momento de fragilidad de la crisis climática que enfrentamos.

La cultura moderna lleva a absorber la idea de la separación, del hombre, de la naturaleza. Esta compartimentación, y división se asume como un sentido común de civilización propio de nuestra era, la objetivación de la naturaleza.

La ciencia no es propiedad de una categoría moderna u occidental e incluso hasta esa ciencia eurocéntrica llegó tarde a la ecología, porque era difícil pensar que destruir la naturaleza podría afectar nuestra vida. Esta distancia del mundo natural se vuelve una forma de supremacía; en ella la naturaleza está subordinada.

Hay mucho sentido común heredado y moldeado por la cultura de la modernidad y su invasiva racionalización en este momento tenemos empezar a desmantelar y tocar la causas que han traído al antropoceno y enfrentar sus implicación de este con la economía y lo que ahora se define como El Capitaloceno.

LA única casa que tenemos: Este punto azul pálido.

«Mis padres me enseñaron que a pesar de que se trata de una condición efímera, estar vivo es algo profundamente bello por lo cual cada uno de nosotros debe sentirse muy agradecido. Tienes el placer de vivir en un planeta en el que has evolucionado para respirar el aire, beber el agua y adorar el calor de la estrella más cercana. Estás conectada con todas las generaciones y los seres vivos de este mundo a través del ADN. También con el universo, porque cada célula de tu cuerpo fue creada en los corazones de las estrellas».

Carl Sagan